Por Virginia Fernandez

Deliciosa, así es Ana Locking. Porque deliciosa es su manera de transmitir su pasión por la moda. El detalle, la sensibilidad y el entusiasmo que traslada Ana Locking no tiene igual.

El pasado domingo, unas horas antes de que mostrase su colección Spinning Destiny en la Cibeles Madrid Fashion Week, tuve la enorme suerte de compartir unos minutos con ella, durante los que no sólo me mostró encantada la colección, prenda a prenda, sino que además charlamos sobre sus proyectos, la pasión por su trabajo y el destino.

El destino es inescrutable. No sabemos lo que nos depara. Pero es cierto que de una manera u otra, nosotros mismos escogemos nuestro destino.

Así, de esta forma tan trascendental, comienza Ana su explicación sobre la colección. Colores con fuerza y brillantes, como el fucsia, el naranja, el ocre o el azul tinta dan paso a combinaciones de tonos nude con rosas palo, formando auténticos puzzles en el patronaje de chaquetas, faldas y vestidos. El patronaje y la costura son dos de los imprescindibles de Ana Locking. “Fíjate en esta costura. Es un entredós, una técnica antiquísima que se usaba sobre todo en los bordados de la ropa interior. Está hecho completamente a mano, y ya a penas se hace. Permite que la prenda tenga movimiento propio ya que la costura se va abriendo y cerrando en función del movimiento de la modelo”. Y, ¿cómo consigues este nivel de artesanía? – “¡pues gracias a una bordadora estupenda, a la que le debo la vida, que si no! Ahora ya no encuentras a nadie que lo haga así, tan sólo máquinas, y para nada es lo mismo. El efecto que se consigue con esta técnica es inigualable”. Y tiene toda la razón. Al salir a la pasarela, le prenda cobra vida en el cuerpo de la modelo.

Ana continúa su explicación, cogiendo cada prenda entre sus manos, animándome a tocarla y a sentir la textura del tejido. “Es genial que podáis venir y ver la colección aquí conmigo. Así se aprecia realmente el trabajo y la dedicación que hay detrás de cada una de las prendas. La pasarela es un espectáculo maravilloso pero en el que se pierden los detalles y a veces no se valora el esfuerzo que hay detrás”.

De repente el color puro se abstrae dando paso a unos maravillosos vestidos estampados. Y por fin entiendo el significado de la colección. “¿Recuerdas un juego de cuando éramos pequeños en el que echabas un pinturas de colores y la rueda giraba con una fuerza motriz fusionando los colores de tal forma que acababa creando mezclas sorprendentes? Spin painting creo que se llamaba. Pues así es como he conseguido este estampado, con un spin painting casero, la fuerza del destino y ¡algo de ayuda!”.
El destino mezcla los colores y Ana Locking los selecciona hasta dar con el estampado idóneo. Y lo plasma en sedas naturales, en unos vestidos largos absolutamente maravillosos y en tejidos de papel. Sí, habéis leído bien, de papel.

La conversación inevitablemente deriva en la relación entre creatividad y comercialidad, en si después de todo el trabajo creativo estas prendas son vendibles. “Las adaptamos para su venta, no sólo por razones comerciales sino también de precio. Por ejemplo, este vestido con las aberturas con el entredós es sólo para pasarela. A la hora de comercializarlo, se ajusta el patrón, se cierran las costuras y queda fantástico”. Y la siguiente pregunta también es inevitable. ¿Por qué Ana Locking triunfa en ventas en el extranjero y no lo hace en su propio país? “Es una verdadera lástima. Por ponerte un ejemplo, la compradora de Harvey Nicols viene temporada tras temporada, es encantadora, se interesa por las colecciones y al final compra. En España, me encuentro llamando a las tiendas para ofrecerles la colección y me responden que no compran moda española”. Las palabras de Ana me hacen reflexionar. ¿Es posible que a veces seamos tan cerrados como para no ver más allá de nuestras propias narices? Qué pena que talentos así encuentren tantas trabas para desarrollarse.

Aparco estos pensamientos a un lado y sigo dejándome transportar por la colección, escuchando atentamente todo lo que Ana tiene que decir. Observo el calzado, los complementos y me detengo ante una mesa repleta de piezas de joyería. “¿A que no dirías que están hechos de cera? Son piezas de latón, latón puro, sin refinar, engarzando piezas de cera, como la de las velas”. Increíble, cuando pienso que ya nada me puede sorprender, llega algo que me deja maravillada. Brazaletes y collares formados por piezas de latón que abrazan trozos de cera pura, bañados en distintos colores. ¡Son auténticas joyas!

El tiempo se nos echa encima y es que estamos a tan sólo unas horas del desfile y los nervios afloran. Por eso, es todavía más de agradecer la paciencia y la dedicación de Ana con El Fashionista. “Le doy muchísima importancia a Internet. Me parece una plataforma de información y comunicación interesantísima, además de ser el futuro, por eso valoro mucho tanto los blogs como los canales de venta online”. Ana nos avanza que su proyecto más inminente es una colaboración con Buy Vip, en la que saldrá a la venta una colección cápsula de la temporada primavera-verano, la que pudimos ver en Cibeles el pasado mes de septiembre.

Y ahora ya sí, el tiempo se nos ha acabado. La dejo supervisando los últimos detalles y yo me dirijo a la sala, a coger sitio y a disfrutar de la presentación de Spinning Destiny, reflexionando sobre todo lo que hemos hablado y desando que el destino le depare lo mejor.